Nada va a cambiar…

• La vida política, cada vez más alejada de la realidad ciudadana

La realidad política apunta a que no se va a producir ningún cambio notable. Ni habrá moción en Torrelavega, ni habrá cambios de actitudes o de aprovechamiento del tiempo (para cosas útiles y urgentes) en el Parlamento de Cantabria. Seguirán todos a su aire, de feria en feria, de reproche en reproche, y tiro porque me toca.

Mientras la región, a sus espaldas, se hunde, nuestros políticos, de todos los colores y de todas las siglas, seguirán aferrados al «Y tú, más» de manual, y al aplauso al compañero de banquillo mientras repudian al contrario, aunque sus trifulcas no sirvan para hacer nada positivo para el ciudadano de a pie.

Cuando los parlamentos se convierten en escenarios de películas surrealistas, entonces sabemos que el fin está cerca, que la ruptura total entre políticos y ciudadanos es cada vez más palpable, y que nada va a cambiar en el día a día de los políticos que viven en su burbuja ajenos e indolentes ante el sufrimiento de sus ciudadanos.