¿El sueño de una noche de verano?

Las previsiones del Gobierno sobre las buenas noticias en torno al paro del mes de Mayo, se han cumplido con el descenso de casi 100.000 desempleados menos. Para ser exactos, 98.265, así como las 134.000 altas en la Seguridad Social.

Si a esto le añadimos los amagos de pactos de estado en busca de apoyos al Gobierno para hacerse fuerte en Bruselas, en materia de empleo juvenil, fundamentalmente, parece que vemos manos tendidas, pero no pensemos ni por un momento en un «gran pacto de estado». Los acuerdos, no pasarían (sí, en condicional, porque no hay nada claro) de ser puntuales. Pero algo es algo y los atisbos de entendimiento no dejan de entreabrir una puerta a la esperanza.

Lo que pasa es que no descarto que sea una especie de «sueño de una noche de verano». Sí, porque desde el Gobierno insisten en que los pactos que propone Rubalcaba irían en contra de la línea marcada por el equipo de Rajoy. Y el Presidente, como sus ministros, no dejan de aclarar que para caer en políticas del anterior Gobierno, no ven la intención de pactos por ninguna parte.

A todo ello hay que aplicarle la llamada «Ley de transparencia». Algo históricamente reclamado y que de consolidarse o simplemente de confirmarse, pondría en cuarentena muchas cuentas ahora dudosas, como las de los partidos, sindicatos, entidades varias… incluida la Casa Real, tantas veces puesta en duda. Sobre todo, por los habituales sectores antisistema, antigubernamentales… anti todo.

De momento, el paro nos da un respiro. Pero hay mucho por hacer. Las PYME`s están a la espera de ayudas (siempre he dicho y mantengo que son verdaderas fuentes de creación de empleo). Los bancos deben abrirse a la concesión de créditos y ayudas.

Ahora mismo, la balanza de pagos de nuestro País, presenta resultados positivos con superávit de exportaciones, así como empresas que reciben «oxígeno», como ACERINOX, presente en la construcción de un puente de 35 kilómetros en Asia, donde aportará materia para su construcción por un importe multimillonario.

Bueno, pues baja el paro en España (excepto en Canarias) y en lo referente a nuestra Región, también es para estar satisfechos.

Pero no hay que bajar la guardia. Un parado ya es un problema y una familia, un drama. Y si empezamos a ver la luz del túnel, que también empecemos a ver la botella medio llena. Que no se quede en el sueño de una noche de verano. Y que las aparentemente buenas intenciones se lleven a la práctica. Y una  demostración de buenas intenciones ería un gran pacto, sí, pero en un tema que preocupa y con razón, como sería promulgar una Ley sobre la Educación para que los datos que nos sitúan con el 30% de abandono y fracaso escolar, pasen a la historia. Que cada legislatura, con una ley distinta, es como para aburrir a cualquiera.