Se solía decir que intentar regular Internet era como poner puertas al campo, una tarea poco menos que imposible. Pues lo cierto es que se puede: a las sanciones y rectificaciones obligatorias recién anunciadas por el Gobierno para que a los «influencers» no les salga gratis mentir y difundir bulos, se suma ahora la sanción más alta hasta la fecha por piratear fútbol.
Así, Roja Directa, cuyo juicio promovido por Mediapro lleva coleando desde el año 2022, ha sido condenada a pagar 31,6 millones de euros al legítimo propietario de los derechos de propiedad intelectual de los partidos de fútbol.
Los daños y perjuicios por las emisiones ilegales que hacía Roja Directa, propiedad de Igor Seoane, han sido fijados por el Juzgado Mercantil número 2 de La Coruña porque la web de Roja Directa permitía el acceso sin permiso a partidos de LaLiga que eran propiedad de Mediapro durante la temporada 14/15.
La sociedad Puerto 80 Projects y su administrador, Igor Seoane, obtenían grandes beneficios económicos por la difusión ilegal de los partidos, y ahora el cálculo de la indemnización se ha hecho en base a la contraprestación económica que Puerto 80 debería haber abonado a Mediapro para tener acceso a la señal.
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