Una representación de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres (FAPA Cantabria) encabezada por su presidenta ha mantenido esta mañana una reunión con el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla. En
dicha reunión FAPA ha trasladado a Revilla la ‘preocupación de las familias’ por la situación que se está viviendo en la Consejería de Educación en estos días por el anuncio del cese de su consejero Ramón Ruiz.
FAPA ha mostrado su ‘estupor’ ante el ‘pésimo momento’ elegido para llevar a cabo un cambio de este tipo, ‘con el curso escolar arrancando y sin valorar sus consecuencias’, por lo que ha exigido ‘que no se produzca ningún cese ni relevo en tanto en cuanto no se asegure la continuidad de los servicios y el trabajo que se estaba realizando con plenas garantías, algo que en estos días se está viendo en serio peligro’, señala el colectivo.
FAPA opina que la educación no puede ser utilizada como ‘un arma de disputa entre partidos o interna’, por lo que exigen que la situación ‘se solvente a la mayor brevedad posible y de forma correcta’.
Según FAPA, Revilla les ha asegurado que ‘en un plazo máximo de una semana la situación estará solventada con todas las garantías en el funcionamiento de las distintas unidades de la Consejería’.
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