Cantabria registró 5.449 accidentes de trabajo con baja en 2018, un 3,2% más que en el año anterior
-CCOO de Cantabria denuncia que detrás de la siniestralidad están la ‘precariedad’ y la ‘debilidad del sistema preventivo’
-En total se han producido en la región 15 accidentes mortales durante el pasado año
En 2018 en Cantabria se produjeron 5.449 accidentes de trabajo con baja, un aumento del 3,2% respecto al año anterior, según el avance de estadísticas publicado ayer por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social. Se trata de datos provisionales, aunque se podrían incrementar cuando se publiquen los datos consolidados del registro de accidentes a mediados del año.
El aumento de accidentes de trabajo con baja se constata en jornada (3,2%) mientras que in itinere se reduce pero de forma poca significativa, con un accidente menos que en 2017. Las secciones de la actividad productiva con un incremento mayor del número de accidentes en jornada de trabajo son la industria manufacturera (85 accidentes más), construcción (47), transporte y almacenamiento (35), agricultura y ganadería (26) y Hostelería (17).
Los índices de incidencia más altos en Cantabria, que se calculan en función del volumen de personas trabajadoras en los distintos sectores, pertenecen a la construcción, la agricultura y la industria.
“Detrás de la siniestralidad está la precariedad y la debilidad del sistema preventivo. Es necesario que se cumpla estrictamente la Ley de Prevención de Riesgos Laborales porque en los últimos años se ha aprovechado la crisis económica para abaratar costes en seguridad”, ha subrayado Laura Lombilla, secretaria de Salud Laboral de CCOO de Cantabria.
Aunque la siniestralidad mortal ha descendido en los accidentes en jornada, de 12 en 2017 a 8 en 2018, han aumentado, sin embargo, los accidentes mortales in itinere, ya que se han producido dos más, con un total de 3.
Si analizamos el aumento de los accidentes en jornada, se puede comprobar que los de carácter leve han crecido en 183 más con respecto a 2017, un 3,50%, alcanzando los 5.406. En cambio, se observa que en los accidentes in itinere no se ha producido un aumento en los de carácter leves sino en los graves y mortales, con dos más en cada uno de ellos.
“Desde 2013 las estadísticas de accidentes de trabajo no han parado de crecer. No podemos olvidar que la Salud Laboral es un aspecto fundamental en el mercado de trabajo y que refleja el estado de los y las trabajadoras en Cantabria. Hay que velar porque se sigan a rajatabla todos los protocolos de prevención para evitar que se produzcan accidentes que a todas luces podrían evitarse”, ha concluido Lombilla.
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