Bomberos autonómicos del parque de Villacarriedo extinguieron ayer un incendio de una habitación en una casa rural en Vega de Pas
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David Laguillo
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-El incidente no provocó heridos, dado que los inquilinos confinaron el incendio, avisaron al 112 y los servicios de emergencias actuaron con celeridad
Santander – 04.11.2019-. Bomberos del Servicio de Emergencias Cantabria 112 del Gobierno de Cantabria extinguieron ayer por la tarde un incendio de una habitación en una casa rural en la localidad de Vega de Pas. El incidente no provocó heridos, dado que los inquilinos dieron aviso de la situación al 112 y los servicios de emergencias actuaron con celeridad.
El incidente se produjo en una casa rural en Vega de Pas, en la CA-631 punto kilométrico 2. Una construcción de 2 plantas, de 68 metros cuadrados cada una, con estructura y techos de piedra, paja y madera. En la planta inferior se encontraba el sótano donde guardaban leña y herramientas y la planta de la vivienda tenía 3 habitaciones, un baño, una cocina y un salón pequeño.
Cuando prendió una de las habitaciones de la vivienda, los inquilinos consiguieron confinar rápido el incendio cerrando dicha habitación y el resto de habitaciones de la casa, cubriendo con toallas mojadas todas las puertas. Esta actuación favoreció que el calor no prendiera en llamas las otras estancias.
El Centro de Atención de Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria recibió la llamada de aviso a las 17:40 horas y movilizó a los bomberos autonómicos del parque de Villacarriedo, a personal sanitario del 061 de manera preventiva, junto a agentes de la Guardia Civil.
Los bomberos del parque de Villacarriedo acudieron con una bomba rural pesada y un camión nodriza. A su llegada, localizaron el foco del incendio en una habitación debido a un colchón que había ardido y aunque había mucho humo consiguieron extinguirlo rápidamente, dado que el fuego estaba bastante confinado.
Pero al arder la madera a nivel del suelo se comunicó con la planta inferior del sótano, donde caían chispas y rescoldos. Entonces los efectivos bajaron a controlarlo, refrescando con agua y revisando con cámara térmica.
La labor más compleja fue el saneamiento del tejado de la habitación afectada, que contenía una capa de paja que había cogido temperatura. Fue necesario desmontar 3×2 metros de losas de piedra y retirar la paja caliente y la madera que se encontraba en el interior para que no colapsara el tejado completamente. Una vez controlado, revisaron todo con cámara térmica para asegurar que no hubiera posibles focos secundarios que pudieran reavivar el fuego.
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